martes, 3 de mayo de 2011

En el pueblo de Jimenez.

Bueno hoy, cumpliendo condena, me gustaría escribir sobre mi puente, el cual he pasado en el pueblo de mi amigo David Jimenez con otros cuantos amigos mas.
A principios de la pasada semana David me dijo que si me gustaría irme a su pueblo este fin de semana que íbamos a ir unos cuantos, que saldríamos el sábado por la mañana y regresariamos el lunes por la noche, yo obviamente, accedí si mis padres me lo consentían, así que ese mismo día se lo pregunte a mi madre, que en un principio me dijo que si, pero acabo diciendo que se lo preguntara a mi padre porque el domingo era el día de la madre y que decidiera el, entonces esa noche durante la cena saque el tema, y le acabe convenciendo para que me dejara ir, mediante el método del disco rayado... Así que le dije a Jimenez que si que iría ese "finde" al pueblo, pero el mismo viernes, a los 3 que estamos hoy cumpliendo condena, nos dijeron el veredicto final de esta, el cual consistía en quedarnos en casa hoy y mañana, como todos ya sabéis, entonces esto torció las cosas, pues no sabia si después de aquello me dejarían ir, así que esa noche estuve hablando con mis padres sobre el tema, que finalmente, me dijeron que ellos no tomarían ninguna represalia por el castigo impuesto por el colegio, entonces el mismo sabado a las 8 de la mañana nos fuimos a Mendez Álvaro a comprar los billetes para el autobús.
Como ya sabíamos el día que íbamos a volver, compramos un billete de ida, y también el de vuelta, para que no retrasar al bus allí, y nos dijeron que el viaje de vuelta sería a las 2:15 de la tarde del Lunes, entonces ya nos embarcamos en un viaje de 3 horitas, repleto de curvas en el cual acabamos la mayoría mareadisimos, como era de esperar pues el viaje era largo, caluroso y muy movido, pero finalmente llegamos sin tener que aguantar algún vomitado, llegamos con una lluvia que allí llamaban "calabobos" porque parecía que no mojaba pero acababas calado, así que nos acercaron hasta la casa donde nos íbamos a alojar en coche, repartidos en 2 viajes, a mi me toco el segundo.
Al llegar a la casa se repartieron las habitaciones, las cuales no se acabaron cumpliendo por distintos problemas, en cada una de las 2 noches, metimos nuestras cosas en los armarios, y nos fuimos a dar una vuelta por el pueblo, el cual era grandísimo. En esa vuelta me compre un tirachinas, el cual nos acabamos comprando casi todos porque molaba muchisimo.
Ese día no paso nada interesante que escribir aquí así que pasare a la noche.
Estuvimos durante la noche en casa haciendo una guerra con las pistolas de bolas y también en un local la mayor parte de esta, estuvimos bebiendo unos refrescos y luego en un bingo, el cual gano el borracho del pueblo, un gran amigo de Montero. Después nos fuimos para casa y yo me fui a la cama por razones varias, los demás se quedaron con la prima de Jimenez y una amiga suya difícil de ver, abajo, me contaron que estuvieron haciendo tonterías varias durante esa noche.
Al día siguiente me levante a las 11:30 desayune y limpie lo que había ensuciado la noche anterior, después de esto comimos y nos fuimos a una especia de fiesta que se montaba por el patrón del pueblo a una finca muy bonita que estaba alejada del pueblo, en la cual habían montado una carpa, barra libre y tenían música folclórica puesta. Era un ambiente bastante agradable, pues tenias mucho espacio para moverte con grandes praderas, estuvimos allí un rato largo y luego nos fuimos a casa con unas amigas del pueblo, estuvimos otro rato allí, nada a destacar, y por la noche cenamos y nos volvimos a ir allí.
Por la noche el ambiente era aun mas agradable, y estuvimos allí bastante tiempo, hasta que ya se iba todo el mundo y nos volvimos para casa, a la que salíamos de allí, un grupo de chicos del pueblo estaban en la salida y pasamos por delante de ellos, se nos quedaron mirando raro, pero nada seguimos y ellos se quedaron allí, cuando todavía nos tenían a la vista hicimos la típica broma de bajarnos los pantalones unos cuantos, a lo que ellos respondieron tirando piedras, una 'bromita' de allí.
Obviamente, dieron a un amigo en el brazo, así que nosotros contestamos haciendo lo mismo y alguien dio al Cebolla en toda la clavicula a lo que este grito como si se le fuera el alma... Todavía no sabíamos donde le habíamos dado por lo que nos fuimos corriendo temiendo haberle impactado en la cabeza, luego paramos y estos chicos nos alcanzaron y siguieron tirando piedras, pero esta vez a los pies. Hicimos caso omiso a esto y seguimos para adelante, hasta el momento en el que nos separamos.
Allí, ellos giraban hacia la izquierda y nosotros a la derecha, nos ofrecieron a ir con ellos, no se con que fin, pero dijimos que no, que nos íbamos para casa, a lo que ellos respondieron con su broma típica, ponerse a tirar piedras... Obviamente también les tiramos nosotros y nada, seguimos para adelante... Ellos se conocían el pueblo como la palma de su mano, entonces nos empezaron a llover piedras en cada esquina, hasta que llego el momento de girar para ir hacia casa, en ese momento estábamos con mucha tensión y un amigo tiro una piedra que paso a uno de ellos rozando, y se pusieron a insultarnos, obviamente nosotros también lo hicimos, y seguimos para adelante corriendo porque se juntaron un montón de chavales en un momento.
Jimenez vino que esa noche iba a dormir con nosotros para que no hiciéramos ruido, y ellos se fueron.
El último día hicimos poca cosa salimos un rato a dar una vuelta Gonzalo, Montero, Ismael y Yo y cojimos el bus de vuelta, viaje que se me hizo mas ameno, por causas que desconozco.
Y este ha sido mi puente, ahora me voy a hacer deberes.
Adiós,
Javier Rubira.

3 comentarios:

isma dijo...

Alma de cántaro lo del calabobs se dice en todo el mundo jajaja y a mi en la vuelta que nos dimos me echas o algo así

Javier dijo...

Cierto se me olvidaba el Ismael jajajaja Pues no sabia lo del calabobos jajajajaja Ahora te pongo lo siento ajajaja

isma dijo...

Estas perdonado jajaj

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