Un buen sabado. Parte I

Después de los ansiosos 31 días de castigo, por fin llego el reencuentro, el reencuentro con los amigos, el autobús, el caminar, en definitiva, con la calle. Si señores, antes de ayer pude volver a reencontrarme con la calle, y bueno no de mala manera, pero es que ayer el segundo día que pude salir después de mi dantesco castigo, me hizo olvidar no haber salido esos 31 días, pues fue uno de los mejores días en mucho tiempo, bueno y como se que todos, los que no lo saben ya, quieren saber como fue mi sábado, pues os lo narrare queridos lectores.

No empezó bien pues el despertador sonó a las 7:15 de la mañana, tenía partido, como la mayoría de los sábados, a las 9, y la convocatoria es una hora antes, entonces a las 7:15 me despierto para salir de mi casa a las 7:45, pero este sábado era diferente, este sábado sería EL SÁBADO, por fin después de 2 meses y 9 días de liga, pudimos ganar, y de manera muy gratificante, contra los segundos de liga, día 22 de enero de 2011, Felicidades Carolina, por fin ganaríamos, pero yo eso cuando sonó mi odiado despertador no la sabía, y lo apague y me dije a mi mismo en 5 minutos me levanto y, como era de esperar, me dormí, había quedado con "L" a las 7:50 al lado de mi casa, pues me desperté a las 7:55 me vestí a una velocidad fugaz, veloz cual rayo, para no variar, y me fui corriendo hasta donde habíamos quedado, allí me esperaban, Carolina, Luis y su padre, pero bueno, hubo otro contratiempo, con las prisas se me olvido la mochila con toda la equipación, y tuve que volver a mi casa a por ella, total que llegamos al campo 10 minutos tarde, pero no paso nada, no eramos los últimos, bueno pues nada, fuimos al vestuario nos cambiamos, charla del entrenador, bueno lo normal... y salimos al terreno de juego, nos calentamos, y ya empezó el partido, íbamos bastante bien, atacábamos, la defensa estaba muy fina, que mas se puede esperar, bueno pues nos pusimos 2-0 por delante, perfecto ¿No creen? Pues nada, nos metieron un gol y todo bien, empezó la segunda parte y para mi sorpresa, no me cambio, me dejo jugar un rato mas, eso me agrado así que me esforcé al máximo, pero no fue suficiente y nos pusimos empate,  entonces ya el entrenador decidió cambiarme, quedaban 20 minutos aproximadamente y el marcador estaba igualado, este resultado se mantuvo un tiempo, alguna expulsión polémica, algún pique ente jugadores, pero nada a destacar hasta que quedaban 3 minutitos para el final en los cuales nuestro delantero pichichi a pase del gran Ismael, anoto el gol que sería de la victoria, yo desde el banquillo fui corriendo hasta la masa de jugadores para felicitarles y abrazarles, un momento muy emotivo, pero eso no había acabado, quedaban unos minutos, que para mi fueron interminables, pero finalmente, toco el gran conocido PI-PI-PIIIIIIIII y granamos el partido, muy merecidamente, la alegría se desato en nuestros rostros, teníamos tres puntos, 3 de 21 pero eso no importaba, lo importante es que habíamos ganado... cuando me apetezca os narrare la mejor parte de mi sábado.

Adios, 

Javier Rubira